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martes, 20 de marzo de 2007

Amarte libremente




Cómo dejar volar a quién espero...






Cuando reflexiono entre lo que se produce al crearse la amistad y el amor entre dos personas, inmediatamente me arroja que es el producto del conocerse tan interiormente y por los cuales nuestros sentimientos cambian de un simple entusiasmo, al efecto de sentir que nos estamos haciendo más fuertes en lo que nuestro corazón siente y más certeros en actuar porque de ninguna manera queremos dañar a quien queremos, por todo lo que se ha formado y por lo que el tiempo nos ha hecho ver que es real y bueno.

Vamos enriqueciendo sutil y pausadamente nuestra alma y nuestro pensamiento, con lo que vamos descubriendo día a día en esa persona, ya sea a gusto de uno o no, aceptando al otro como se nos vino, como se nos fue moldeando, también con nuestra propia ayuda.

No es fácil estar de a dos, más si esas almas traen historias tan propias y tan marcadas, pero ahí está el gran desafío, a complementarnos y a hacer que de a poco podamos aunar las diferencias y lograr puntos concretos de acuerdo.
Creo que eso es amor.

Cuando se imponen afectos, cuando se imponen decisiones sobre todo cuando la pareja ya está en una etapa de convivencia con tal de retener y remarcar “fidelidad”, comienza a originarse todo lo contrario, disminuye el desarrollo afectivo, comienzan las asfixias y por ende se comienza a caminar por el borde de la infidelidad.

Me ha costado entender que la libertad es importantísima en una relación, que no se puede mantener al otro amarrado a una, aunque se quiera, porque a la larga la cuerda se cortará por algún lado y se perderá todo lo que con tanto esfuerzo se construyó.

Me ha costado encontrar la fórmula justa para el equilibrio. Pero he avanzado bastante. Sin duda la fé en mi misma, y la convicción de lo que siento me hará al final , lograr ese objetivo.

Libertad es una palabra tan limpia y tan grande, que nos deja en plena voluntad de amar verdaderamente con todo lo que se siente, y sin restricciones , ni imposiciones, sólo con la libertad que brinda el amor verdadero, ese que siempre debe de existir y que se da naturalmente no pidiéndo nada a cambio.

Tal vez he caído en grandes errores, por mi falta de experiencia, o bien por capítulos que quedaron algún día muy arraigados en mi persona , porque me golpearon fuerte, si, puede ser, pero también los errores y los golpes enseñan ,tal vez no al tiro, pero si a la larga, cuando me he dado cuenta que me estaba significando retroceder y caer.

Tal vez si al decir, que “cuando estás a mi lado , me lleno de una inmensa dicha y cuando te vas mis colores cambian y llega el ahogo de la tristeza”, no sea una buena frase que denote amor, sino egoísmo e inseguridad.

Tal vez si escribiera que” cuando no estás a mi lado, siento que algo me falta pero estoy segura que lo recuperaré y que voy a sentirme feliz porque tú lo estarás, extrañándome también”, sea lo más acertado al expresar lo que siento, pero ¡qué difícil es! Desprenderse de lo que quiero para mi misma , para estar bien yo y qué pasa con el otro? A la larga se ahogará, estoy segura.

Es por esto que debo comprender su viaje y a la vez dejar mis alas abiertas para acogerlo, cuando decida por su propia cuenta regresar, que lo haga libremente y con todas las ganas, porque fue su propia decisión y porque es lo que desea para el resto de su vida.

Tampoco puedo ahogar con todo lo que quiero dar y entregar , pues siempre creo que es poco, que debo entregar más , no sé, como que así saciara mis ansias propias , pero también sé que habrá un punto que asfixiará y quebrará. Todo es loable en su justa medida.

Me he podido dar cuenta que te amo, no solo por lo que me entregas cada día, a pesar de no ser tan buenos a veces, ni tampoco solamente por lo que eres, sino por todo lo que fui cuando estuve contigo y por lo que siento cuando estoy ahora que me encuentro lejos, porque me haces tocar mi propio corazón y ver mi mente encaminada a un noble objetivo, el de consolidar esto que tenemos.

A la vez, tomas mis defectos y le das un tratamiento tan a tu manera, los has depurado tan milimétricamente que los haces pequeñitos al lado de las virtudes que tú mismo me has descubierto.

Me contemplas y descubres cosas buenas en lo más mínimo que te puedo dar y te digo algo? ese es un don, si, porque ves de lo malo lo bueno y no es fácil lograrlo.

Cuando hay amor , no debe haber temor y vaya que me ha costado asumirlo, tal vez otra vez por lo vivido, pero sé que si te amo en libertad , todo lo que se haga se logrará siempre de la mejor manera. Para entregarte lo mejor.

Todo lo logrado a pesar de cada dificultad presentada, ha hecho que la amistad se amplíe, que el sentimiento se solidifique uff!! quién diría no? De esta manera tan frágil aparentemente para el que no lo entiende y lo ve desde afuera; que la confianza aumente dándome la certeza de que serás capaz de recibir y aceptar todo lo que te enuncie con respeto, con una pizca de temor a veces por como soy.

Que puedo charlarte de todo hasta mi más oculta intimidad y la sabrás entender, de acercarme cada día un poco más a tu esencia, a nivel espiritual, intelectual y afectivo y que cuando ya mi acercamiento casi te toque, sabré que estaré llegando a la tan ansiada felicidad , esa que ambos queremos encontrar y mantener cerca si es que queremos claro.

Considérate querido, muy querido y merecedor del más puro amor que emana de mi, pues para merecer el ser amado, también debemos de amarnos, pues otorgar amor , admiración y respeto no es porque si, sino cuando se tiene la certeza de que somos capaces de recibirlo, que lo merecemos y lo creemos.


Déjate amar, que yo haré lo mío, si te quieres quedar yo te daré ese refugio.
En este nuevo tiempo de cambios para ti y para mi, permitámonos navegar más juntos que antes al mismo puerto, porque hemos saldado tormentas y de a poco las que quedan o las que vengan se irán disipando , así lo veo lentamente, aunque a veces las nubes me tapen el sol.
Me estoy convenciendo más aún cuando vamos tomados de la mano.

Voy a nadar en tu esperanza y a dormirme en tu sosiego, para esperar el sol que de una vez aparezca y nos brinde su calor e ilumine nuestras almas y rostros.

Si llegas a irte , no te olvides de dejarme un poco de amor en mis manos, pues para que cuando decidas regresar, lo encuentres guardado aquí como un tesoro muy preciado.

No enmudezcamos, ni silenciemos nuestras bocas, si me amas, aboquémonos nuestra meta desde acá, desde allá, y saltemos todo lo que tengamos que saltar con la firme convicción que ésta es nuestra historia y que ni el caprichoso destino , ni el añejo tiempo nos podrán arrebatar.

Por lo pronto te invito, deja tomarme de tu mano, y tómate de la mía, abracémonos fuertemente , acerquemos nuestras mejillas y amémonos libremente para embarcarnos más profundamente en lo que viene, en lo que tú y yo queremos y ambos sabemos que es...

1 comentarios:

Anónimo dijo...

amiga es la pura verdad,lindísimo.
un beso para ti te leo seguido
el yo